El VII Campeonato del Mundo de Combate Medieval se celebrará en el castillo de Belmonte (Cuenca) del 30 de abril del 3 de mayo de este año (si la pandemia del “corona virus” lo permite), según informó el propietario del castillo Javier Fitz Stuart y presidente de la Asociación Castillos y Palacios de España, en presencia de Cristian Bernal, primer participante en un combate medieval, y de la alcaldesa de Belmonte, Lourdes López Porras. Les acompañaban algunos de los guerreros miembros de la selección nacional de combate, diez en total, entre los que se encontraba una mujer, del club Urna.
Lo que parece ser un espectáculo, es más bien un deporte de contacto, con un gran componente histórico, basándose en los torneos de la Europa medieval de los siglos AIV y XV. Actualmente este deporte se practica por todo el mundo siendo sus principales promotores Rusia, Ucrania, Polonia y los Estados Unidos. En este próximo campeonato participarán unos 650 luchadores de 32 países.
En el informe que se facilitó a los medios informativos, se dice que el combate medieval es “un deporte histórico practicado desde el medievo y retomado en la actualidad, con armaduras y armas con pleno rigor histórico”. Los combates son a plena potencia y hay varias modalidades, como son los duelos y las “melés”. En los primeros las armas utilizadas son la espada y el escudo, la espada y el broquel, la alabarda y la espada larga, mientras que en lo segundos combates son batallas grupales de 5 contra 5, 10 contra 10 ó 16 contra 16.
Uno visitó el castillo el mismo día en el que se presentó el campeonato mundial. Y vio una pelea para la clasificación de la selección nacional. Fue muy curioso ver los golpes y embestidas que se daban con las armas medievales, mientras unos jueces trataban de dilucidar quién de los dos contendientes era el campeón. Este castillo, que es muy interesante en la historia y hoy como atractivo turístico; es de estilo gótico - mudéjar y fue mandado construir por don Juan Pacheco, Marqués de Villena, en 1456. El marqués era el hombre de confianza de Enrique IV de Castilla, el hermano de Isabel la Católica, que le sucedió a su muerte.
Merece la pena recorrer sus estancias, pues está abierto al público y también visitar el Parque de Trebuchet, el parque temático de las máquinas de asedio, con el trebuchet (trabuquete, en castellano; un arma de guerra rompedora de murallas) más grande del mundo. El recinto fue restaurado en 2010 y desde entonces está abierto al público todos los días del año, menos estos de clausura por la normativa legal de estar recluido en casa por el “corona virus”. Desde su apertura lo han visitado más de 200.000 personas.
Para saber algo más, picar el siguiente enlace: www.castillodebelmonte.com
Otros Artículos del Columnista
