Este lunes 16 de diciembre, será presentado el Gabinete de Ministros del futuro gobierno de coalición en Uruguay. En ese acto quedarán impuestos en sus cargos los compatriotas que habrán de dirigir los dos ministerios que competen a nuestra especialización periodística. Ya nos hemos referido al ministerio de Transporte, ya le hemos expresado al futuro conductor de esa cartera nuestra reflexión, nuestras sugerencias. Es el turno ahora de analizar el ministerio de Turismo. Estará a cargo en la máxima jerarquía, de Germán Cardoso, un político con varias legislaturas encima y gran experiencia, a nivel departamental y nacional. El "número dos", en la Subsecretaría, ha sido confiado a un hombre de directa relación y confianza del presidente electo Luis Lacalle Pou, nada menos que su asesor en turismo desde 2013, el empresario hotelero, también con experiencia parlamentaria, Remo Monzeglio. Ardua tarea le espera a la nueva gestión.
A la hora que estamos escribiendo este artículo, no se conocen los demás nombres de la estructura principal, por lo tanto, no sabemos aún quien tendrá a su cargo la Dirección General de Secretaría (número tres) ni la Dirección Nacional de Turismo, cargo que al menos hasta el presente, ha cobrado relevancia de cara al relacionamiento con las direcciones de turismo de todo el país y diferentes operadores, entre otras funciones.
El nuevo ministro
En este espacio, como ha quedado registrado, hemos insistido, nos hemos jugado, en pos de promover la designación del mejor técnico que tiene nuestro sector para el cargo, como es reconocido por casi todos, Arnaldo Nardone, perteneciente al mismo sector del Partido Colorado que Cardoso. Lo hicimos sabedores que desde el liderazgo político sectorial se le había llamado para actuar. El dato de la realidad indica que la designación no fue para él y que la misma recayó en Germán Cardoso como había trascendido oportunamente, nosotros mismos lo habíamos consignado y hasta había sido desmentido por él mismo. En su momento expresamos nuestra discordancia con el nombramiento del político fernandino, porque estábamos convencidos que en la actual coyuntura, se necesitaba -más que nunca-, a un técnico a cargo y no a un político.
El dato de la realidad nos dice que el ministro de Turismo del próximo gobierno será Cardoso, entonces, nobleza obliga, no corresponde otra cosa que desearle el mayor de los éxitos y ofrecerle desde este momento, prudencial y respetuoso silencio editorial durante el período necesario para encarar las primeras evaluaciones de su gestión. No hace falta que demostremos ni expliquemos nada, simplemente como hombres del turismo y ante los hechos consumados, como bien nacidos uruguayos queremos que el organismo que rige la principal actividad de nuestra especialización, funcione de la mejor manera posible. Para que ello ocurra, será fundamental que Cardoso acierte y discrepancias aparte, es lo que anhelamos, con la mayor sinceridad.
El nuevo subsecretario
Hasta que empezó a sonar el nombre de Cardoso y que Lacalle Pou señaló públicamente que quería "una figura del Partido Nacional de su confianza en cada ministerio", sabedores que él no manejaba como posibilidad tener un cargo ejecutivo en el gabinete del futuro gobierno, no veíamos a Remo Monzeglio en el cargo que finalmente va a ocupar. A partir de lo dicho por el presidente electo, conocedores del sitial preferencial que le asigna a Monzeglio como "su" referente del turismo, empezamos a hacernos a la idea que finalmente se concretó. De la noche a la mañana entonces, el exitoso empresario hotelero tuvo que "cambiar el chip" y como nos dijo oportunamente, estará 100% al servicio de lo que le pide su colectividad para honrar el cargo, como buen hijo de esta tierra.
Conocemos sobradamente el pensamiento del nuevo subsecretario. Tenemos, a lo largo de los años, muchísimas coincidencias acerca de lo que necesita el turismo uruguayo para convertirse definitivamente en la herramienta idónea para la creación de empleo directo e indirecto y la generación de riqueza vía divisas por el turismo receptivo. Estamos convencidos que Monzeglio iniciará su tarea con la responsabilidad y dedicación que le caracteriza. Quienes lo conocen bien, nos dicen que Cardoso es un hombre inteligente. Estamos entonces ante una buena posibilidad de que el ministerio de Turismo se parezca mucho más a lo que siempre hemos querido.
Nueva etapa entonces.
Demos vuelta la página y hagamos votos para que el Mintur funcione de la mejor manera posible.
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