"Agencias seguirán quebrando y afectando a sus Clientes"
Estando en Bahía, el pasado sábado 17 de febrero, publicamos Las agencias seguirán quebrando y afectando a sus clientes y en la parte medular decíamos:
"Desde hace muchos años, los cuatro quintos del mercado se lo reparten entre tres o cuatro grupos que funcionan a traves de poco más de una docena de agencias. Estamos diciendo que el otro quinto se lo reparte el resto, o sea, una enormidad de empresas de las cuales, saneadas totalmente, viables, redituables, no deben sobrepasar un dígito porcentual, sí, reiteramos, las que deberían seguir funcionando no deben llegar al diez por ciento de esa gran mayoría de empresas que se reparte menos del veinte por ciento que dejan sin atender “los grandes”. El propio empresariado y las autoridades deben sincerarse más temprano que tarde. Esa gran cantidad de empresas que atienden la más pequeña porción de mercado en un gran porcentaje no son viables y no todas -más bien las menos- tienen capital propio como para responder a eventuales coyunturas dramáticas. En idioma uruguayo claro, cuando se corta la calesita, sobreviene de inmediato la quiebra y la afectación a los pasajeros".
Respondiendo a un WhatsApp muy agresivo, enviado por un operador mayorista, actual directivo de AUDAVI, en referencia a esa columna, editorializamos el lunes 19, diciendo OK debatamos .
Recordamos el texto del mensaje recibido: "Lamentable la nota. Pensé que tenías alguna idea del tema de las agencias de viaje. Pero quedó claro que no tenes ni idea de las cifras que manejas ni de la situación actual del gremio. Te quedaste con las historias viejas. Te olvidaste de decir que el 99% de los pasajeros que viajan a través de agencias de viaje no tienen ningún problema...".
Entonces en el referido artículo editorial del lunes 19 de febrero pasado, dijimos: "Nuestro interlocutor, desde este momento tiene la más absoluta libertad de aparecer en escena por la vía que entienda pertinente y haciéndolo a modo personal o corporativo, ya que actualmente es directivo de la asociación de agencias de viajes uruguayas. Eso sí, esperemos que el debate eleve el nivel y podamos llevarlo adelante con argumentos sólidos y en un marco de respeto mutuo. Entonces, esperamos si los hay, los resultados de algún estudio, análisis, investigación, encuesta, lo que sea, realizado por nuestro interlocutor o por la asociación que él integra, que desmienta rotundamente lo que nosotros expresamos. Que nos diga que las agencias propiedad del grupo Jetmar, de Planet Travel, de Abtour, las relacionadas con Sevens´s, con Jorge Martínez, no son más o menos, más de doce o más o menos, menos de veinte. Que nos diga si un mercado de algo más de tres millones de habitantes (de los cuales viajan una parte muy inferior, sensiblemente inferior), necesita la cantidad de agencias de viaje habilitadas que hay en Uruguay. También esperamos que nos informe cuáles fueron las acciones que él realizó o la asociación que integra, respecto a evitar la defraudación de servicios a los 200 pasajeros que dejó el cierre de la última agencia, ya que sabemos positivamente que "se sabía" en el ambiente que ya habían rebotado cheques y se esperaba de un momento al otro el desenlace, máxime, teniendo en cuenta que el titular de la misma, hasta poco tiempo atrás, integró la directiva de la asociación."
Fuimos personalmente a ver al opinante
Regresamos al país sobre el fin de semana pasado y hasta ayer miércoles 7 de marzo no habíamos podido llegar al centro de Montevideo a la oficina del operador en cuestión. Debíamos hacerlo, porque -extrañamente-, en vez de los argumentos que le invitamos a expresar, nos hizo llegar una muestra fehaciente de lo que hacen quienes no tienen argumentos para justificar sus bravatas. Aclarada -y cerrada- esa infeliz chicana, habiendo transcurrido ya más de dos semanas de nuestra invitación a debatir, le preguntamos personalmente si tenía algo que nos desmintiera y justificase su descalificante mensaje, lo cual como suponíamos, no apareció.
Por lo tanto, una vez más, como ya es costumbre -y no sólo en el ámbito del turismo-, queda comprobado que es mucho más fácil descalificar, agraviar, menospreciar que debatir argumentando, que desmentir con fundamentos, en una frase, se sigue prefiriendo "bocinar y no aguantar".
Punto final.
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